Los pescadores del Cantábrico han dado inicio esta semana a la costera de la anchoa, que oficialmente comienza el 1 de marzo. Sin embargo, las condiciones climáticas adversas y el temporal han dificultado el proceso, lo que ha resultado en capturas «testimonial» y de tamaño reducido.
César Nates, presidente de los pescadores cántabros, ha señalado que la actividad ha sido limitada debido al mal tiempo. Este martes, se subastaron alrededor de 8.000 kilos de anchoa, una cantidad significativamente baja en comparación con años anteriores. Las capturas han sido mínimas, y los barcos de Cantabria apenas han podido salir a faenar debido a las condiciones climáticas desfavorables.
En las lonjas vascas, donde se realizaron las subastas, el precio del kilo de anchoa alcanzó aproximadamente los 5 euros, lo que refleja la escasez del producto en el mercado. Nates ha destacado que este precio es «irreal» y refleja la falta de anchoa disponible.
La esperanza reside en que mejoren las condiciones climáticas y que los buques cántabros puedan salir a la mar durante la noche para aumentar las capturas en los próximos días. Sin embargo, la incertidumbre persiste sobre la cantidad y calidad de la anchoa disponible en la región.