El Gobierno de Cantabria ha diseñado un plan integral destinado a reducir las listas de espera sanitarias en los próximos tres años, para lo cual se destinará un presupuesto total de 65 millones de euros. Este plan incluye la implementación de incentivos a los profesionales de la salud basados en la productividad.
El objetivo primordial del Ejecutivo autonómico es lograr que para fines de 2026, el tiempo medio de espera para intervenciones quirúrgicas sea de 80 días, para las primeras consultas sea de 40 días, y para las pruebas diagnósticas sea de 30 días.
Para alcanzar estas metas, se prevé realizar en los próximos tres años un total de 24,100 intervenciones quirúrgicas adicionales, así como 61,000 consultas y 71,000 pruebas diagnósticas más de las que se realizan actualmente.
El plan contempla optimizar la eficiencia de la sanidad pública tanto en la actividad ordinaria, como en la extraordinaria, mediante derivaciones a la sanidad concertada cuando sea necesario. Se destinarán 55 millones de euros durante tres años para la ejecución del plan, a los que se sumarán 5 millones de euros adicionales anuales para retribuir a los profesionales médicos en función de su productividad a partir del segundo año.
La presidenta del Gobierno, María José Sáenz de Buruaga, junto al consejero de Salud, César Pascual, han presentado este viernes en rueda de prensa el Plan Integral de Reducción de las Listas de Espera 2024-2026. Este plan, que ya está en marcha y ha sido consultado con los profesionales sanitarios, busca revertir el crecimiento continuo de las listas de espera sanitarias de los últimos ocho años, resultado de la inacción de la Consejería de Sanidad del anterior Gobierno.
La presidenta ha destacado que estas listas de espera, que han alcanzado niveles sin precedentes en Cantabria, tienen solución y pueden revertirse. Por tanto, el Gobierno regional ha elaborado un plan sólido, realista y de alta calidad técnica que establece una dirección estratégica para los próximos tres años.