El Gobierno de Cantabria y la Junta de Personal Docente volverán a sentarse este miércoles, 2 de julio, para reactivar las negociaciones sobre la actualización salarial del profesorado, en una cita convocada por la Consejería de Educación que dirige Sergio Silva (PP). El encuentro tendrá lugar en la antigua sede del CEIP Simón Cabarga y se produce en un clima de tensión acumulada tras meses de discrepancias y con la amenaza sindical de convocar huelga para el inicio del próximo curso escolar.
Mientras el Ejecutivo presidido por María José Sáenz de Buruaga mantiene como punto de partida una propuesta de subida lineal fija de 150,23 euros mensuales, la Junta Docente reclama que se destine parte del presupuesto reservado para mejorar los sexenios a reforzar esa cantidad fija, algo que, según los sindicatos, permitiría “abrir un margen real para negociar”. “Si se mueve dinero de la formación al complemento lineal, sí hay espacio para un acuerdo”, han señalado.
Este lunes, coincidiendo con la fecha inicialmente propuesta para la reunión, la Junta convocó a los medios para denunciar que el Gobierno pospuso el encuentro hasta el 2 de julio. A pesar de ello, han confirmado que acudirán a la mesa de diálogo, insistiendo en que no solo el consejero Silva, sino también la presidenta Buruaga debería participar, ya que consideran que ella debe “liderar” el proceso negociador. Además, reclaman que antes del encuentro se envíe una propuesta previa para que el diálogo sea efectivo y haya un verdadero intercambio de posiciones.
Desde la Junta han criticado duramente la oferta de la Consejería, calificándola como “la peor propuesta económica que se ha presentado hasta ahora”, en referencia a los acuerdos de 2003, 2005 y 2008, recordando además que en este último caso aún se deben 30 euros del último tramo no aplicado debido a las medidas de austeridad. “Queremos que se muevan en sus pretensiones porque hay dinero disponible, probablemente más que en ninguna otra época”, aseguraron representantes de ANPE, STEC, CCOO, TU y UGT. Como argumento, mencionaron otros acuerdos del Ejecutivo con diferentes colectivos para mejorar sus condiciones laborales y subrayaron que “los docentes no pueden quedar atrás”.
También indicaron tener conocimiento de partidas presupuestarias que no se han ejecutado y que podrían destinarse a este acuerdo salarial. Más allá del dinero, rechazaron que la Consejería pretenda decidir unilateralmente qué formación deben realizar los docentes para acceder a los sexenios, una cuestión que, según afirmaron, “debe revisarse profundamente”.
La Junta mostró disposición para que la reunión del miércoles se prolongue “el tiempo que haga falta”, advirtiendo, no obstante, que si a finales del verano no hay acuerdo, el curso escolar “podría no comenzar con normalidad” y se estudiarían “medidas contundentes”.
Por otro lado, los sindicatos reprocharon la actitud “despectiva” con la que la presidenta Buruaga se refirió a la Junta Docente durante el reciente debate sobre la orientación política del Gobierno. “No se trata de contentar a un grupo de delegados, sino de compensar a los profesores de Cantabria, que son quienes realmente importan”, afirmaron, criticando las palabras de Buruaga sobre no buscar “el aplauso” de la Junta.
En respuesta, el Gobierno regional recordó su voluntad de “alcanzar un acuerdo” que mejore la educación y las condiciones salariales dentro del marco presupuestario vigente, manteniendo la propuesta de subida lineal de 150,23 euros mensuales y la mejora de todos los sexenios hasta un máximo acumulado de 187,73 euros, lo que supone un incremento total de casi 338 euros mensuales.
Desde la Consejería expresaron además su disposición para seguir dialogando sobre las horas de formación vinculadas a los sexenios y la integración del profesorado especialista en sectores singulares de Formación Profesional.