La Fiscalía de Cantabria ha solicitado un total de 18 años de prisión (6 y 12, respectivamente) para un hombre acusado de cometer abusos sexuales continuados contra sus dos sobrinas, que comenzaron cuando las menores tenían siete años y se prolongaron hasta que alcanzaron la pubertad.
Según el escrito de acusación, el imputado aprovechaba las visitas de sus sobrinas a su domicilio, donde solían quedarse a dormir los fines de semana. Los abusos, según el Ministerio Público, se producían cuando su esposa no estaba en casa o dormía. El hombre accedía entonces a la habitación de las niñas y las tocaba bajo la ropa, incluyendo sus genitales, bajo la amenaza de guardar silencio.
La primera de las víctimas, hoy una mujer adulta, sufrió estos abusos desde los 7 u 8 años hasta la menstruación, lo que le provocó un trastorno ansioso-estresante agudo y, en la actualidad, evitación del contacto social. Cuando dejó de acudir a la casa de su tío, su hermana pequeña, cinco años menor, comenzó a sufrir abusos similares, aunque en su caso el acusado llegó a forzarla a realizar actos sexuales más graves, como masturbaciones y felaciones.
La segunda víctima también desarrolló cuadros de ansiedad, somatizaciones y rechazo a las relaciones interpersonales, requiriendo en varias ocasiones atención médica urgente.
Petición de penas y reparación
La Fiscalía considera probados dos delitos continuados de abuso sexual a menores de 13 años con abuso de superioridad, agravado en el segundo caso por acceso carnal. Por ello, reclama:
- 6 años de prisión por los abusos a la primera sobrina.
- 12 años por los cometidos contra la segunda.
- 20 años de alejamiento (7 y 13, respectivamente) y libertad vigilada una vez cumplidas las condenas.
- 55.000 euros en indemnizaciones (20.000 y 35.000 euros) por daños morales y secuelas.
El juicio, que se celebrará en la Audiencia Provincial de Cantabria, comenzará este lunes 26 de mayo a las 10:00 horas y podría extenderse al día siguiente.