El Rayo Cantabria sufrió una dolorosa derrota en su regreso a los Campos de Sport de Astillero, donde la Gimnástica se llevó la victoria (0-1) en el duelo cántabro. Un gol en el minuto 84, en una acción en la que el filial jugaba momentáneamente con un hombre menos, decidió un partido igualado y con pocas ocasiones.
Ezequiel Loza presentó varias novedades en su once inicial, dando entrada a Samu Calera, Entrecanales, Néstor, Ángel Pérez y Diego Díaz. El encuentro comenzó con la intensidad propia de un derbi regional, pero sin llegadas claras a portería debido, en parte, al estado del terreno de juego. Primo tuvo la primera ocasión para la Gimnástica, pero Álvaro Jiménez atajó el disparo. La respuesta del Rayo llegó poco después con un remate de Baldrich que Iván Crespo detuvo sin dificultades.
En la segunda mitad, los visitantes introdujeron cambios y Santamaría estuvo cerca de adelantar a su equipo en el minuto 59, pero el portero del Rayo evitó el gol. Con el paso de los minutos, el empate parecía inevitable hasta que, en el 84, la Gimnástica aprovechó una acción desafortunada: Carrascal tuvo que salir del campo para cambiarse la camiseta, dejando a su equipo con diez momentáneamente, y en ese instante Tobar bajó un balón que Primo envió a la red.
El Rayo intentó reaccionar con la entrada de Mario Fuente en el 87, pero ya no hubo tiempo para cambiar el resultado. Tras el partido, el técnico Ezequiel Loza lamentó la falta de fortuna en los últimos encuentros y aseguró que el equipo trabajará durante la semana para cortar esta racha negativa en su próximo compromiso en Ávila.