Ni el frío ni la persistente lluvia lograron empañar el esperado encuentro con Papá Noel en Piélagos. Aunque inicialmente se había previsto celebrarlo frente al Ayuntamiento de Piélagos, las inclemencias meteorológicas obligaron a trasladar la cita al polideportivo municipal de Renedo. Allí, niños y familias no faltaron a la cita con la ilusión intacta.
Papá Noel, recién llegado desde Laponia y acompañado por su inseparable séquito de elfos, aterrizó en la zona sur del municipio tras su visita al pueblo de Liencres el día anterior. Los más pequeños, con una mezcla de emoción y nervios, desfilaron uno a uno ante el entrañable personaje, que dedicó unas palabras amables a cada niño antes de inmortalizar el momento en una fotografía.
El acto concluyó con un detalle dulce que encantó a todos: una pequeña réplica de Papá Noel hecha de chocolate que los niños recibieron como recuerdo de esta mágica jornada.