La delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, ha presidido este jueves un acto de reconocimiento y reparación personal a Julián Quintana Ruiz, ejecutado en 1939 tras ser condenado por un consejo de guerra ilegítimo del régimen franquista. En su intervención, Gómez de Diego ha subrayado la importancia de la memoria democrática, destacando el papel de la Ley de Memoria Democrática en devolver la dignidad a las víctimas del franquismo.
«La memoria es democracia», ha afirmado la delegada, destacando los avances logrados en la reparación histórica, como la exhumación de más de 5.600 cuerpos, 637 declaraciones de reconocimiento tramitadas, y la resignificación de espacios como el Valle de Cuelgamuros. «No hay tirano cuya obra merezca ser ensalzada en una democracia como la nuestra», ha remarcado Gómez de Diego.
La delegada ha expresado su agradecimiento a los familiares de Julián Quintana, a quienes ha elogiado por su «generosidad y valentía». Asimismo, ha reconocido la labor de las asociaciones memorialistas «por mantener viva la luz de la memoria». También ha llamado a defender y cultivar la memoria como la mejor manera de proteger la democracia frente a amenazas involucionistas. «Ninguna democracia se construye ni se consolida sobre pactos de silencio», ha afirmado.
Gómez de Diego ha señalado que «la historia la escriben los vencedores», y ha resaltado cómo el franquismo borró la memoria de aquellos que lucharon por la democracia y la libertad. «Hoy rendimos homenaje a esa España que es parte esencial de nuestra identidad», ha declarado, destacando que el objetivo no es dividir, sino unir a todos en una memoria democrática objetiva y común.
Julián Quintana Ruiz:
Julián Quintana Ruiz, maestro de obras y militante de la Unión General de Trabajadores (UGT) y el Partido Socialista, fue detenido en 1937 por tropas franquistas y condenado a muerte por un juicio sumarísimo. Fue ejecutado en 1939 y sus restos reposan en una fosa común en el cementerio municipal de Ciriego.
Con este acto, el Gobierno de España ha declarado ilegítimos los tribunales que lo condenaron, reconociendo a Julián Quintana Ruiz como víctima de la represión franquista. Este acto de reparación se enmarca en la aplicación de la Ley 20/2022 de Memoria Democrática, que invalida los tribunales y resoluciones dictadas por motivos políticos o ideológicos durante la Guerra Civil y la dictadura.
Reacciones:
En el acto, también intervinieron Aurora Ocejo, hija y nieta de represaliados, quien hizo un alegato a favor del «respeto» frente a la intolerancia, y Antonio Ontañón, reconocido investigador de las fosas comunes en Cantabria, quien reclamó más investigaciones. La delegada del Gobierno entregó a Ontañón una litografía y una rosa en agradecimiento por su labor.
Ana Quintana, nieta de Julián Quintana Ruiz, expresó su satisfacción por la reparación moral de su abuelo y reafirmó el compromiso de su familia por exhumar sus restos.